Miradas que mejoran: la construcción de una comunidad profesional de conocimiento

22 marzo 2024

Miradas que mejoran es una formación liderada por la Fundación Promaestro, en colaboración con la Fundación SM, e impulsada dentro del Movimiento Reimaginar juntos, que surge como respuesta al tercer informe global de la UNESCO “Reimaginar juntos nuestros futuros. Un nuevo contrato social para la educación”. La finalidad última de esta formación era promover la construcción de comunidades profesionales de conocimiento a través de la colaboración docente. Esta colaboración se impulsó a través de diversas dinámicas profesionales como son: la reflexión y discusión sistemática de la práctica educativa; la autoobservación sobre el desempeño profesional; y la sistematización y transferencia del conocimiento educativo generado.

La formación, Miradas que mejoran: Construyendo comunidades profesionales de conocimiento, se desarrolló durante el período que comprende los meses de febrero y junio del 2023.  La formación se organizó en 5 módulos de trabajo, basados en el impulso y desarrollo de las tres dinámicas colaborativas de interdependencia: la reflexión y discusión sistemática de la práctica educativa, la autoobservación sobre el desempeño profesional y la sistematización y transferencia del conocimiento educativo generado. Por tanto, la finalidad última de la formación fue acompañar al profesorado en el proceso de validación y sistematización de la práctica educativa. Los módulos que la conformaron fueron:

  1. Abrir nuestras aulas
  2. Observar(nos) para transformar la educación
  3. Mirar para mejorar
  4. Consolidar la comunidad profesional de conocimiento
  5. Transferir el conocimiento docente

Con respecto a la participación en la formación se puso en marcha un proceso de selección con el objetivo de escoger aquellas prácticas educativas que cumplieran los siguientes requisitos:

  • La práctica se centra en algún ámbito de los trabajos de los Futuros de la educación (UNESCO, 2022).
  • La práctica menciona los fundamentos teóricos que la sustentan.
  • El objetivo que la práctica persigue busca resolver una necesidad previamente identificada y relevante.
  • La práctica es realista y puede desarrollarse en el tiempo establecido para la formación.
  • La práctica es observable de manera que se pueden formular criterios de observación que permitan recoger información sobre su impacto educativo.

El proceso se compuso de dos fases. En primer lugar, se hizo un llamamiento de participación a través de diversos canales de difusión para que el profesorado comprometido con el movimiento de los Futuros de la educación y que, por tanto, estuviera desarrollando prácticas educativas que trabajaran alguno de los ejes propuestos por el informe de la UNESCO, se inscribiera como interesado en el proceso formativo. En segundo lugar, de estos docentes interesados, solo pasaron por un proceso de selección aquellos que enviaron una propuesta de práctica educativa con el objetivo de validarla, sistematizarla y transferirla durante la formación de Miradas que mejoran. Tal y como se ha explicado con anterioridad se seleccionaron aquellas prácticas que cumplieran con los requisitos antes mencionados. El resultado final del proceso fue la inscripción y participación de 55 docentes, de los cuales 30 culminaron y completaron el proceso formativo.

Estos 55 docentes procedían de diferentes países tales como: Ecuador, Perú, Colombia, Guatemala, Chile, México, Puerto Rico, República Dominicana, Honduras y España. Esta diversidad también se vio reflejada en las diferentes etapas educativas, quedando todas representadas (desde infantil hasta la educación superior); el tipo de enseñanza según su regulación (educación formal y no formal); y las disciplinas curriculares (lengua, matemáticas, inglés, geografía, educación física, entre otras). Por tanto, Miradas que mejoran resultó ser una comunidad profesional de conocimiento de carácter internacional basada en el trabajo autónomo y colaborativo entre el profesorado participante.

Para su ejecución se utilizó una plataforma online de la fundación SM a través de la cual se realizaron todas las actividades y se gestionó toda la comunicación correspondiente a la formación. Tal y como se ha mencionado, la formación se componía de cinco módulos que contenían los siguientes apartados:

  • Una vídeo-píldora de contenido teórico: en ella se explicaban los conceptos teóricos más relevantes y se ofrecían instrucciones de carácter tanto general como específico sobre el proceso de formación que estaban llevando a cabo y las tareas a ejecutar.
  • Tareas por ejecutar: en cada módulo el profesorado encontraba las tareas específicas a realizar. Estas estaban ordenadas de manera progresiva y se relacionaban entre sí, ya que estaban orientadas al logro final de sistematización de la práctica educativa.
  • Sesión online: en cada módulo se llevó a cabo una sesión online que tenía el objetivo de resolver dudas sobre el contenido y las tareas correspondientes.

El profesorado participante fue organizado en grupos de trabajo para fomentar la colaboración y la discusión pedagógica durante todo el proceso. Estos grupos de trabajo se organizaron por temáticas en función de los objetivos e intereses de las prácticas educativas presentadas. Además, el equipo de Promaestro hizo un acompañamiento personalizado y constante al profesorado participante durante todo el proceso formativo, con el objetivo de resolver aquellas dudas que pudieran surgir y guiar el proceso de sistematización de la práctica educativa.

A continuación, se describe el detalle de cada uno de los módulos, explicitando su contenido y las tareas propuestas.

1. Abrir nuestras aulas

Los objetivos del primer módulo fueron presentar y discutir las propuestas educativas seleccionadas.

La primera actividad que debieron realizar fue completar la plantilla de la práctica educativa (Anexo 1). Dicha plantilla ha sido elaborada a partir de los recursos ofrecidos en Miradas que Mejoran: Guía para la observación de la práctica educativa (Verástegui y Pérez, 2021). El profesorado debía completar sus primeros cuatro puntos con el objetivo de comenzar el proceso de sistematización de dicha práctica y poder recibir una primera retroalimentación sobre la misma. Dichos puntos son:

  • Resumen: responde al “¿Qué?”
    • Descripción breve y significativa de la práctica educativa
    • Palabras clave
  • Cuestión educativa a resolver: responde al “¿Por qué?”
    • Explicitación del eje de trabajo de los Futuros de la Educación en el que se enmarca la práctica educativa.
    • Aproximaciones teóricas que justifiquen y sobre las que se sostiene la práctica.
  • Contexto y participantes: responde al “¿Para qué?”
    • Enumeración del grupo o grupos de alumnos a los que se dirige la práctica.
    • Explicitación de los profesores y/o profesionales educativos implicados.
    • Descripción del centro educativo.
  • Descripción de la práctica: responde al “¿Cómo?”
    • Objetivos educativos perseguidos (didácticos).
    • Descripción y secuencia de actividades (tiempo, espacio, metodología, recursos, contenidos, evaluación).

Posteriormente, los docentes tuvieron que realizar un breve vídeo en el cual respondieran a las preguntas ¿De qué trata tu práctica? y ¿Cuál o cuáles de los 5 ejes que plantea el informe de los Futuros de la educación trabaja tu práctica educativa? Dicho vídeo fue compartido a través de la plataforma colaborativa Padlet (https://es.padlet.com/). El objetivo de esta tarea fue que cada docente pudiera presentar al resto de participantes de la formación su práctica educativa, explicitando cómo se relacionaba con alguno de los ejes de los Futuros de la educación, y recibir una primera retroalimentación sobre la misma, a través de los comentarios elaborados por los compañeros y compañeras. Esta presentación permitió a los participantes, por un lado, conocerse y conocer las prácticas educativas implicadas en la formación y, por otro, comenzar a conformar una comunidad profesional entre ellos.

2. Observar(nos) para transformar la educación

El segundo módulo tenía por objetivo conocer las claves y fines de la observación de la práctica educativa, así como familiarizarse y adaptar el instrumento de observación propuesto (Ver Anexo 2). Este instrumento de observación estaba compuesto de tres dimensiones -con sus respectivos factores e indicadores-, elaboradas a partir de la Guía para elaborar criterios de observación, anteriormente citada. Dichas dimensiones son:

  1. El diseño y eficacia de la práctica, en la cual se analiza todo lo relacionado con la metodología que se está utilizando, los recursos, secuencia, organización, etc.
  2. El aprendizaje del alumnado, en la cual se valora la consecución de los objetivos de aprendizaje propuestos.
  3. La praxis docente, en la cual se reflexiona en torno al rol docente, el vínculo con los estudiantes, la comunicación, entre otros aspectos.

En la tarea de este módulo se les pidió que adaptaran el instrumento de observación a sus propias necesidades. Es decir, que se les animó a agregar, quitar o adecuar tanto los factores como los indicadores de cada dimensión con el objetivo de obtener un instrumento contextualizado a su práctica educativa específica.

3. Mirar para mejorar

El tercer módulo fue el módulo central de la formación en el cual los docentes tuvieron que llevar a cabo el proceso de autoobservación de la práctica educativa y recoger las evidencias recopiladas mediante el instrumento de observación.

Se optó por la autoobservación de la práctica (y no por la observación entre iguales) porque la participación del profesorado fue de manera individual (no participaban varios docentes de un mismo centro) y la posibilidad de hacer parejas de observación entre los participantes era prácticamente imposible debido a la diversidad de países y autonomías de las que procedía el profesorado. Así, cada docente tuvo que registrar la información de su propia práctica educativa a través del instrumento de observación trabajado en el módulo anterior. También se animó a que utilizaran otro tipo de instrumentos como el vídeo o notas de campo que complementaran y enriquecieran la información recogida.  Para llevar a cabo este proceso de autoobservación los docentes debían seguir los siguientes pasos:

  1. Planificar las fechas en las que se realizaría la autoobservación.
  2. Autoobservar la práctica educativa al menos dos veces.
  3. Completar el instrumento de observación.

Finalmente, para terminar este módulo los docentes realizaron otra tarea, tras ejecutar el periodo de observación, que consistió en reflexionar de manera crítica y sistemática sobre las fortalezas y áreas de mejora de la práctica educativa (Ver Anexo 3). Esta reflexión debía partir de los aspectos observados y recogidos sobre las tres dimensiones del instrumento de observación, permitiendo un análisis más holístico y global de la práctica educativa.

4. Consolidar la comunidad profesional de conocimiento

El cuarto módulo tuvo como objetivo discutir y reflexionar sobre la práctica educativa a partir de las evidencias recogidas y los resultados obtenidos. Para ello, el profesorado participante volvió a grabar nuevamente un vídeo con el objetivo de compartir con el resto de los docentes los principales hallazgos obtenidos tras realizar la observación. Estos hallazgos se orientaron a describir las fortalezas y áreas de mejora que fueron trabajados de manera individual en el módulo anterior. Específicamente el profesorado debía contestar la siguiente serie de preguntas en el vídeo:

  1. ¿En qué grado se han cumplido los objetivos educativos que perseguías a través de la práctica?
  2. ¿Se han trabajado los Ejes de los Futuros de la educación propuestos a través de la práctica?
  3. ¿Cómo resultó la recogida de evidencias? ¿Obtuviste toda la información que necesitabas para recoger el impacto de tu práctica? ¿Cómo podrías mejorar esa recogida de evidencias?

Posteriormente, estos vídeos fueron subidos de nuevo a una pizarra colaborativa para que los docentes del mismo grupo de trabajo pudieran visualizarlos y ofrecer una segunda retroalimentación sobre la práctica educativa ejecutada y observada. Con tal propósito se les animó a que contestaran la pregunta: ¿Qué aprendiste de este docente y de su práctica educativa? Esta discusión pedagógica se llevó a cabo en la plataforma creando un espacio propicio para la reflexión colaborativa y la retroalimentación profesional.

5. Transferir el conocimiento docente 

Finalmente, el quinto y último módulo de esta formación tuvo el objetivo de sistematizar las evidencias recogidas de la práctica educativa y difundir los resultados obtenidos con la comunidad educativa. Al profesorado participante se le propuso dos tareas. La primera fue que elaboraran una reflexión final sobre los principales aprendizajes adquiridos durante el proceso formativo. Para esto, se les facilitó una pizarra colaborativa con forma de mapamundi en la que cada docente compartió su reflexión en la ubicación del mapa donde la práctica educativa había sido ejecutada. Esta evidencia final del trabajo realizado por todos los participantes da cuenta de la diversidad y riqueza de la comunidad profesional tanto en entorno como en el resto de las dimensiones de la práctica educativa (nivel educativo, tipo de educación, área de conocimiento…). La pizarra colaborativa está disponible en el siguiente enlace.

Mapamundi Miradas que mejoran. Fuente: Recuperado de El mapa de los futuros de la educación (padlet.com)

La segunda tarea propuesta fue la culminación de la plantilla de sistematización de la práctica educativa.  El profesorado participante tuvo que revisar todo el trabajo realizado durante la formación, así como las propuestas de mejora realizadas por sus compañeros y compañeras y por el equipo de Promaestro. Así, esta tarea final se enfocó en completar todos los apartados de la plantilla y revisar y ampliar el trabajo realizado previamente durante el módulo uno de la formación. Los apartados que se incorporaron fueron los siguientes:

Criterios y herramientas de observación

  • Instrumento y criterios de observación: Insertar el instrumento que utilizado para la autoobservación de la práctica educativa.
  • Integrar otras herramientas utilizadas para recoger información (por ejemplo: diario de campo, registro de imágenes, grabaciones, plantillas…).
  • Incluir una reflexión sobre el grado de satisfacción de las herramientas y criterios de observación utilizados: ¿Cómo resultó la recogida de evidencias? ¿Obtuviste toda la información que necesitabas para conocer el impacto de tu práctica? ¿Cómo podrías mejorar esa recogida de evidencias?

Resultados obtenidos

  • En la primera dimensión: Diseño y eficacia de la práctica educativa.
  • En la segunda dimensión: Aprendizaje del estudiantado.
  • En la tercera dimensión: Praxis docente.
  • Incluir una reflexión sobre el impacto y el grado en el que se han cumplido:
    • Los objetivos educativos perseguidos con la práctica educativa.
    • Los ejes de trabajo enmarcados en el informe de los Futuros de la Educación.

Retos y dificultades encontradas

  • En la primera dimensión: Diseño y eficacia de la práctica educativa.
  • En la segunda dimensión: Aprendizaje del estudiantado.
  • En la tercera dimensión: Praxis docente.

 

¿Cuáles fueron los resultados de Miradas que mejoran?

De los 55 participantes iniciales el 60% culminó el proceso formativo, es decir, un total de 30 docentes completó satisfactoriamente todas las tareas propuestas. Tal y como se comentó en el apartado anterior, se llevó a cabo un segundo proceso de selección de las prácticas para considerar su publicación y transferencia a una comunidad educativa más amplia. Este proceso de selección buscaba considerar como publicables las prácticas que siguieron un proceso de sistematización riguroso tras los procesos de reflexión y colaboración dentro de la formación realizada. Además, también se tuvo en cuenta la participación y compromiso del profesorado participante en la formación. Dicho proceso de selección fue llevado a cabo por las tutoras a cargo de la formación Miradas que mejoran del equipo de la Fundación Promaestro.

En cuanto a la evaluación de la formación, se realizó una encuesta de satisfacción final al profesorado participante con el objetivo de que valoraran la pertinencia y calidad de la misma. Las preguntas siguieron un formato tipo Likert, con una escala de valoración del 1 al 4, donde 1 era “nada satisfecho” y 4 “muy satisfecho”. De los 30 profesores que culminaron la formación respondieron a la encuesta 20. Por tanto, se obtuvo el grado de satisfacción del 66,6% del profesorado que culminó la formación, reduciéndose a un 36,4% si tenemos en cuenta a todo el profesorado que la comenzó. Dichas evaluaciones obtuvieron resultados muy positivos de los cuales se destaca:

  • La totalidad de los docentes considera que la formación fomentó la propia reflexión de la práctica educativa (16 participantes puntuaron 4 y 4 puntuaron 3).
  • La totalidad de los docentes consideró que la formación los impulsó a transferir su práctica educativa (18 participantes puntuaron 4, y 2 puntuaron 3).
  • La mayoría de los docentes consideró que la experiencia de formación les permitió identificar las fortalezas y área de mejora sobre las acciones realizadas, siendo solamente un docente el que ha puntuado 2.
  • La mayoría de los docentes consideró que las actividades de retroalimentación entre los compañeros fortalecieron la reflexión colaborativa sobre la práctica educativa. Siendo 18 los docentes que puntuaron entre 3 y 4, y dos profesores puntuaron con 2.
  • 19 docentes consideraron que la formación les permitió tener una experiencia de generación de conocimiento educativo a partir de la práctica educativa.

Además, se preguntó a los docentes: ¿Cuál consideras que ha sido la mayor aportación de este curso a tu práctica profesional? Destacando las siguientes respuestas:

  • La sistematización y la corrección de algunos fallos que no había percibido hasta que hice la autobservación.
  • Ser capaz de observar mi propia práctica, de manera sistematizada y poder compartirlo con mis colegas.
  • La validación de la práctica docente.
  • Considero que el hecho de conocer y conectar con las prácticas educativas de mis compañeros al intercambiar ideas, pensamientos y sugerencias fue enriquecedor.
  • El regreso a ver cada cosa que hago como una oportunidad para investigar y aportar conocimiento.

Para finalizar este apartado nos gustaría exponer algunos de los testimonios que el profesorado participante de la formación compartió en la última pizarra colaborativa del mapamundi

>> Lo que he aprendido es a sistematizar mucho el trabajo que realizamos con el alumnado que presenta desmotivación frente a su tarea educativa. Lo que más me ha servido, en esta sistematización, es a realizar con instrumentos una revisión de mi actuación dentro del programa. Lo que me ha ayudado a recoger evidencias que me han llevado a mejorar un poco más dicho proyecto, potenciando los puntos fuertes y revisando los puntos débiles para convertirlos en puntos fuertes. Muchas gracias a Promaestro y a la Fundación SM, por esta formación que he recibido. (Proyecto “A por todas”. Víctor Molinero Barranco, España).

>> Ahora lo que fue un experimento tiene una forma sistematizada, un mecanismo de evaluación y un proceso de observación para recoger evidencias con respecto a los resultados de la práctica. Todo esto es lo alcanzado a través del trabajo en este curso, el cual nos ha recordado que de lo que ideamos para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje podemos llegar a una investigación que, una vez transferida, será nuestra contribución a la transformación que necesita y espera el futuro de la educación. (Proyecto “La expresión escrita en lengua inglesa como proceso de autocorrección de errores a través del portafolio del estudiante”. Juan Alberto Acosta Salas, Ecuador).

>> El proceso de formación de este curso sobre “Los futuros de la educación” ha resultado sumamente valioso en tanto nos abre ventanas que nos permiten conocer de cerca metodologías, proyectos educativos de distintas partes del mundo. Me gustó particularmente la experiencia de sistematización de mi práctica docente, ya que genera la consciencia de lo colectivo, pues compartir lo que me ha funcionado en el aula y pensar cómo esa experiencia puede ser replicada en múltiples contextos, aporta gran sentido de trascendencia al trabajo docente. […] Gracias a Promaestro y Fundación SM por esta maravillosa experiencia intercultural y formativa. (Proyecto “La #noclasedeespañol: Reto Pandora”. Lauristely Peña Solano, República Dominicana).

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Anexos

En los siguientes enlaces puede descargar plantillas y formularios utilizados en la recogida de observación de la iniciativa Miradas que mejoran: